viernes, 9 de junio de 2017

1999-«Desgracia»


Ostensiblemente cojean. Todos, de raso y terciopelo. Un rizo caracolea en la frente de cada uno. Pasaba unos días en Atenas y su viaje coincide con el festival Byron. Decenas de byrons recorren las calles de Vyronia. Empieza a marearse. Una pesadilla no le hubiera resultado tan exasperante. Unos, corsarios de opereta; otros, donjuanes de tebeo; algún manfred estudiadamente despeinado. Solo intuye complicidad en la única persona que mira con gesto aún más sorprendido que el suyo. Piensa que se deben echar un cable. Se acerca, «John Maxwell», dice alargando la mano, que al instante es aceptada. «George Gordon, encantado».